Todos buscamos la felicidad. Buscamos la chispa que nos haga sonreír; la mirada, el gesto, el momento, el sentimiento que nos haga crispar de emoción y sentirnos completos; sentir que hemos conseguido algo; algo importante y que perdurará para siempre...
No se cuantas personas han conseguido alcanzar esta felicidad. Sólo se de una, que de bien seguro, lo ha conseguido; y en el camino, ha conseguido que millones de otras personas como yo compartamos sus momentos inolvidables; una filosofía, un sueño, y una idea brillante que llevó a cabo de una de las maneras mas bellas posibles.
No hablo de un gran salvador; o de un gran artista, o de Messi; que visto lo que pasó ayer, también podríamos calificarlo de felicidad en estado puro. Hablo, de nada mas y nada menos que de Matt Harding.
(Esperad a verlo cuando acabéis de leer el texto).
Aparentemente, un diseñador de videojuegos que; en un punto de su carrera; y cansado de crear videojuegos violentos y parecidos, decidió dejar el trabajo para gastar absolutamente todos sus ahorros en un épico viaje alrededor del mundo; a la par que se grababa a si mismo bailando en dichos lugares; a veces solo, y cada vez con más gente a su alrededor, creando un legado mágico de su viaje.
Podemos sacar muchas conclusiones del vídeo; casi todas poéticas. Podemos llegar a la conclusión de que en realidad no somos todos tan diferentes; desde los pigmeos africanos hasta los otakus japoneses; pasando por todos los bellísimos lugares que Matt visita. Podemos llegar también a la conclusión de que, a veces, hay que ser suficientemente valiente como para romper las cadenas de la rutina para emprender el viaje de tu vida... Y descubrimos también como una chispa de alegría puede prender fácilmente un fuego de baile alrededor de todas las personas que se encuentran con el en su odisea. Podríamos sacar infinitas conclusiones; todas ellas positivas, y todas ellas admirables.
Pero difícilmente podre yo escribir un texto que equipare en sentimiento a la paz y magia que me transmite el maravilloso vídeo de Matt (el cual no es el único que ha hecho, creo). Así pues, os voy a dejar las conclusiones a vosotros mismos, después de ver el vídeo, (aunque quizás algunos ya lo habréis visto), y os voy a dejar que organicéis vuestros propios sentimientos al respecto.
Disfrutad y comentad (¡con cabeza y opinión, claro esta!).
Em recorda l'estil de dansa del Boris Yeltsin:
ResponderEliminarwww.youtube.com/watch?v=Q5FIoocja4k
Ara que quan se li acabi la pasta no sé què farà...
Màgic.
ResponderEliminarEls vídeos on declara que tot és un timo i després declara que tot allò de que era un timo, és un timo, també són molt bons.
Què puc dir, malgrat el ridícul del ball, o potser per això, no he pogut evitar de somriure durant tot el vídeo. Es fa entranyable, en Matt.
Però, com diu en Pere, quan la font deixi de rajar, haurà de tornar a dissenyar videojocs...
Salut, sort, i fins aviat!
Afortunadament per ell, després de fer el primer video, va conseguir un sponsor per seguir fent viatges d'aquests.
ResponderEliminarHi ha gent amb sort...
Ya me gustaría a mí... bueno, por lo pronto siempre se puede ir al Mont Blanc (;
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